Arismendi se tatuó en cada brazo los nombres de sus padres para tenerlos presentes toda la vida. Agradeció al Comando Svr

Muy triste aún por la muerte de sus padres, el volante de Melgar, Jesús Arismendi encuentra refugio y consuelo en el cariño de su hermana Rita. Asimismo decidió tatuarse en el brazo izquierdo el nombre de su padre, Jesús y, en el derecho, el de su madre, Milder.

-¿Cuándo decidiste tatuarte el nombre de tus padres?

-Después del partido contra Alianza Lima. Lo hice, porque mis padres saben que después de Dios, siguen ellos: mi padre Jesús y mi madrecita Milder. Así, cada vez que vea mis brazos los recordaré.

-¿No te haces daño pensándolos constantemente?

-No. Porque el haber nacido tiene como consecuencia morir en algún momento. Sé que mis padres ya no están en vida y eso me dolerá en el alma toda la vida. Pero, también lo recordaré con mucha alegría.

-¿Alguna promesa por cumplir en sus memorias?

-Trataré de cumplir a cada momento con lo que ellos querían de mí. Apoyaré a mi hermana hoy, mañana y siempre. Seré su guardián y la protegeré.

-¿Te agradó el gesto de la hinchada blanquiazul?

-La barra de Alianza Lima, que con tanto cariño honró la memoria de mis padres con un minuto de silencio el sábado pasado en Matute, siempre estará en mi corazón. Desde aquí les doy las gracias.